Un año más para la supercarretera

Por: JORGE PÉREZ ARELLANO

Que la supercarretera Durango a Mazatlán no vaya a estar lista para este año sin duda es una noticia que entristeció a muchos, pero definitivamente no les sorprendió. Desde que se anunció el proyecto de su construcción, allá por el año 2000, varias han sido las ocasiones en las que la fecha de culminación se ha pospuesto, y una vez más la meta se ha alargado.

Si bien es cierto que las bases de esta magna obra se gestaron y concretaron con el entonces presidente Vicente Fox -aquellos que dicen que fue antes saben bien que no es así, porque hasta entonces sólo se trató de un proyecto en el aire-, quien prácticamente se «adueñó» la obra, pero sobre todo el majestuoso Puente Baluarte, fue Felipe Calderón Hinojosa.

Ambos presidentes sabían de la dimensión de dicha carretera, y del puente que a la larga se convertiría en el más alto en su clase (por lo menos hasta ahora), por lo que Calderón Hinojosa realmente quería ser el que entregara los 230 kilómetros totales, y que por supuesto no pudo, pero logró a marchas forzadas que se terminara El Baluarte en su sexenio.

Al menos en un par de ocasiones, el expresidente, los gobernadores de Durango y Sinaloa, así como los secretarios de SCT de ambos estados, habían prometido que la rúa estaría prácticamente lista en el primer trimestre de este año. No será así.

Primero se dijo que la supercarretera tardaría 7 años, luego se prometió que en el 2010 ya estaría concluida. Llegaron las fechas y la inauguración se prolongó hasta el 2012. Se fue Felipe Calderón y se puso una nueva fecha: 2013. Del lado sinaloense la cruda realidad les hizo reconocer que no podrán con el paquete, y ampliaron la fecha hasta 2014.

Durango cumplió con su parte. Decenas de puentes y cerros que tuvieron que ser «cortados» fueron realizados a lo largo de ya 13 largos años. Sinaloa batalló más, por un lado la cantidad de túneles, alrededor de 60, el más largo de ellos de 2 mil 660 metros, y por otro el desinterés que ese estado ha mostrado con la rúa.

Si bien es cierto que ambos estados se verán beneficiados, la realidad es que a Durango le urge más que a Sinaloa, por las oportunidades económicas y de inversión que representa. Difícilmente se podrá circular completamente por esta nueva carretera antes del 2014. Aunque dicen que si se trabaja a marchas forzadas sí se termina este año, la realidad es que no será así. Habrá que esperar por lo menos 11 meses más para circular por ella, total, como dicen los mazatlecos: «Con o sin carretera a nosotros nos vienen a visitar casi todo el año»… o usted ¿qué opina?

Twitter: @jperezarellano

Publicado el 24 enero, 2013 en Editoriales y etiquetado en , , , . Guarda el enlace permanente. Deja un comentario.

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